Dentro de poco más de un mes darán comienzo los Juegos Olímpicos de París. Aunque el número de turistas que asistan al acontecimiento será muy elevado, también se disparará el número de intentos de fraude en los pagos. Brice Perdrix, CEO de AdvanThink, lo explica.
El 26 de julio comienzan los Juegos Olímpicos de París. Es un momento que muchos aficionados al deporte esperan desde hace tiempo. Se espera que unos 15 millones de turistas visiten la capital durante el periodo festivo. Una cifra colosal que aumentará drásticamente el número de pagos con tarjeta bancaria. Y donde hay un aumento del número de pagos, también hay un aumento del número de fraudes e intentos de fraude.
En efecto, cada gran acontecimiento (como ocurrió durante el Mundial de fútbol de Brasil) va acompañado de un aumento de los fraudes en los pagos, y con ello de un deterioro de la confianza y la imagen del sector bancario. Los defraudadores aprovechan el aumento del volumen de transacciones para pasar desapercibidos, ya sea durante las operaciones con tarjeta en los comercios o en línea.
Una batalla constante
Para intentar minimizar el impacto del fraude en los pagos, varias empresas se han especializado en este ámbito. Es el caso de AdvanThink, líder francés en la lucha contra la delincuencia financiera. En la actualidad, AdvanThink protege cada día transacciones por valor de unos 60.000 millones de euros, lo que representa casi el 95% de las operaciones con tarjetas bancarias en Francia. Sobre todo gracias al uso sistemático de la inteligencia artificial. Pero, ¿cómo funciona en la práctica esta lucha contra el fraude? Brice Perdrix, Presidente de AdvanThink, explica la lucha con más detalle. "Para detectar el fraude, colocamos sondas en todos los flujos de pago o en las interacciones del cliente con su banco. Puede ser cuando teclean su contraseña de banca en línea, cuando solicitan una retirada de efectivo de un cajero automático o simplemente cuando realizan un pago convencional. Utilizamos estos datos para realizar un análisis de comportamiento en tiempo real, a partir del cual podemos predecir el riesgo de fraude asociado a la transacción. Y en función de los resultados que obtengamos, autorizaremos la transacción, la rechazaremos o la autorizaremos, pero advertiremos a la persona y le preguntaremos si es el origen del pago".
Pero, ¿cómo distinguir un fraude de un pago seguro? "Tenemos un conjunto de pistas que apuntan a que se trata de una transacción legítima, pero también a que es un intento de fraude. Y gracias a los datos, así como al análisis del comportamiento, la decisión se toma en tiempo real, en unos milisegundos con algoritmos de IA".
Sin embargo, este método sigue presentando algunos inconvenientes. A veces, la diferencia entre una transacción real y otra dudosa es mínima. Así que es complicado detectar todos los fraudes. "Si realmente quisiéramos evitar todo el fraude, bastaría con bloquear todas las transacciones en cuanto hubiera alguna duda, pero eso se convertiría en un auténtico infierno para los ciudadanos. Imagínese que le pidieran que se identificara tres o cuatro veces en cada pago. Eso sería insostenible", añade Brice Perdrix.
Los Juegos Olímpicos de París, un acontecimiento muy vigilado
En 2022, según un informe de la Banque de France, el porcentaje de fraude por valor y volumen ha disminuido un 4% con respecto a 2021. El porcentaje de fraude con tarjetas bancarias también ha descendido, hasta el 0,053%, el más bajo de la historia. Pero a pesar de estas cifras alentadoras, la celebración de los Juegos Olímpicos de París hará sin duda que estas cifras vuelvan a subir. Como hoy sabemos, la mayoría de los fraudes e intentos de fraude son obra de organizaciones delictivas bien establecidas. Y no dudan en idear métodos cada vez más ingeniosos.
Este es precisamente el punto que a veces preocupa a los profesionales del sector. Especialmente ahora que la inteligencia artificial está tan extendida, los defraudadores también han incorporado el uso de la IA a sus procesos. Esta es una de las razones por las que debemos concienciar a la población en la medida de lo posible. Porque, sí, las innovaciones tecnológicas mejoran constantemente, pero no pueden proteger a los ciudadanos de todas las amenazas. Así que también tenemos que poner en marcha programas de concienciación para que todo el mundo sea consciente de los riesgos asociados a estas prácticas fraudulentas.
A pesar de ello, Brice Perdrix considera que"Francia es uno de los países más eficaces en la lucha contra el fraude bancario, por lo que creo que estamos bien equipados para hacer frente con eficacia a las amenazas a las que nos enfrentamos". La respuesta se dará en los Juegos Olímpicos dentro de poco más de un mes.